Toda la vida es un regalo. Cada persona, momento y cosa es un regalo (sólo que rechazamos los regalos y he aquí que no conseguimos el regalo que nos envían los demás). Todas las cosas les llegan a quienes son agradecidos. Hay una gran verdad para esto y he aquí la razón por la cual funciona tan bien. Por ley de causa y efecto, tu gratitud atrae aquello por lo cual eres agradecido. Tú deberías ser agradecido aún antes de que lo recibas porque, por ley, sabes que lo recibirás. De hecho, ya lo tienes antes de que lo pidas. La gratitud acelera la recepción debido a que es una declaración de creencia (tú ya estás genuinamente y con entusiasmo en un estado de gratitud, porque lo recibirás, o aún más precisamente, ya lo has recibido y estás por vivirlo).
La gratitud está allí aún antes de que "recibas" lo que estás buscando. En la realidad, ya lo tienes todo; simplemente no lo estás viviendo todavía.
Por lo tanto, la gratitud es el primer paso para recibir y experimentar. Es una afirmación de que sabes que lo tendrás. Imagínate el sentirte agradecido y entusiasmado por un evento futuro ¿Te das una idea de cuanta fé representa eso y a qué mayor velocidad te lleva hacia tus metas? ¡Es mágico! La gratitud crea y alimenta tu fe, aparte de ser lo correcto.
Gracias...
A lo que le agradeces, te revela sus dones y te sirve. Sé agradecido por todo, porque todo te ayuda a descubrir un aspecto de tí mismo.
El truco es aprender a querer todo lo que ya tienes, a amar el presente instante, y a todo lo que conlleva y a no preferir nada que no sea el momento presente cuando estás en el momento presente. Haciendo esto, te pone en un estado de calma y en la posición más adecuada para encontrar los dones contenidos en el momento presente, de manera que puedas crecer rápidamente en la dirección en la que te quieres mover.
La gratitud por todas las cosas del pasado, presente y futuro, obra milagros.
Manteniendo constantes las demás cosas, un individuo o sociedad tendrán riqueza y felicidad en la medida en que sean agradecidos por todo y entre sí.
La gratitud no necesita mucha explicación (tú ya sabes cómo ser agradecido). Dentro de tí sabes qué mágico es esto. Todo lo que necesitas reconocer es que cada momento, persona y cosa te fue traído por tus propias decisiones, pensamientos, acciones y estados de ser. Tu lo hiciste. El mundo simplemente se crea alrededor de tal manera que puedas vivenciar tu Ser y recrearte a tí mismo. Consecuentemente, sé agradecido por cada momento, persona y cosa (ésta es la mejor manera de encontrarte a tí mismo). Recuerda, lo que resistes, persiste. La gratitud niega a la resistencia. Una vez que eres agradecido puedes mirar claramente todas las cosas y verte a tí mismo.
Otro premio extra de la gratitud es la fe. Siendo agradecido hoy por las cosas que te has propuesto vivir en el futuro, te vuelves siempre más seguro de que las vas a recibir y ésto a su vez las atrae hacia tí. ¡Te permite entusiasmarte por el futuro! Muy bien, sigamos...
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